En una vivienda entre medianeras, situada en Manacor hemos realizado una cubierta ajardinada de 40 m2, con 25 cm de espesor de tierra, que se está utilizando como huerto urbano ecológico.
A partir de la primera planta el elemento estructural predominante es la madera: vigas de madera laminada y tableros estructurales OSB, combinados con pilares y jácenas metálicas. La cubierta está calculada para soportar una sobrecarga de unos 800kg / m2.
Sobre las viguetas de madera laminada GL24h de 10 × 20 cm se han colocado tableros estructurales de OSB de 22mm del tipo 3 (utilizables en medio húmedo). Las pendientes han sido realizadas con el mismo aislamiento, para reducir pesos, en este caso se ha colocado como mínimo 8 cm de corcho natural. El corcho es un excelente aislante térmico, tiene un buen comportamiento acústico, es transpirable, imputrescible, resiste el ataque de insectos y hongos, no emite vapores ni partículas tóxicas, tiene una elevada resistencia a la compresión, es ignífugo (M -2) y tiene una buena relación calidad-precio.
Bajo el corcho, en la cara caliente se ha colocado una barrera de vapor para evitar las posibles condensaciones intersticiales.
La impermeabilización utilizada ha sido una tela de EPDM de 1,14 mm, sin adherir al soporte de base y rematada con un perfil lateral de sujeción. El EPDM, dentro del mundo de las telas impermeables es la mejor a nivel de flexibilidad, resistencia y durabilidad y permite la recogida de agua potable. Es sin duda la más ecológica, comparada con las de PVC o las asfálticas. Es el tipo de tela que se suele utilizar en los pequeños y grandes embalses.
Se realizó la prueba de estanqueidad preceptiva, para asegurarnos de que no perdiera por ningún punto. Las uniones de este tipo de tela se hacen "vulcanizadas", que sería como una soldadura en frío, por lo que una vez pasado el tiempo necesario las dos partes forman un mismo cuerpo. Es el mismo proceso que se hace cuando se pone un parche a una rueda de bicicleta.
Empezamos la cubierta ajardinada propiamente dicha. Las capas de abajo a arriba son:
1.- Manta retenedora: absorbe agua para mantener más tiempo la humedad y ahorrar agua, y protege la tela impermeable.
2.- Placa drenante de polietileno: también hace la función de retener parte del agua y drenar el resto, además de proporcionar protección a las capas inferiores.
3.- Manta separadora: geotextil antiraíces, para que las raíces no desciendan por debajo de este nivel. También evita que las tierras pasen a un nivel inferior.
Ha llegado la hora de colocar el sustrato o la tierra preparada. En este caso un compañero me preparó una tierra donde mezcló fibra de coco, turba, estiércol de animal y piedra pómez, para que fuera ligera, esponjosa, con suficientes nutrientes y con capacidad para retener el agua.
Ya podemos empezar a replantear el huerto. Aquí aplicamos el sistema de "Parades en Crestall" del mallorquín Gaspar Caballero. Se trata de hacer al menos 4 paradas con unos caminos intermedios para pasar.
Con este sistema la tierra que se cultiva no se pisa, por eso hay refuerzos en medio de cada parada para poder poner el pie si es necesario. Dentro de cada parada se coloca sustrato o estiércol compostado. En medio de las bovedillas se siembran flores y plantas aromáticas para favorecer la polinización de los cultivos. También es conveniente montar un sistema automático de riego, para reducir trabajo. El recomendado es el de tubo exudante.
Entonces dentro de cada parada se siembran las semillas o el plantel según las familias a plantar. Seguidamente dentro de cada parada tiene unas familias asignadas y cada año se hace una rotación para que un mismo cultivo no vuelva pasar por la misma parada hasta después de 4 años, de esta manera los nutrientes que aporta o saca cada cultivo se compensan.
E aquí el resultado unos meses después de haber hecho la siembra: judías, tomates, pimientos, berenjenas, lechugas, pepinos, cebollas, remolachas, ... prácticamente sin tener que quitar ninguna hierba y sin utilizar ningún pesticida. Un elemento adicional que no puede faltar en el huerto es la compostera, para compostar los restos de fruta y verdura de las comidas de cada día así como los restos de poda del huerto.
Aquí podéis ver el esquema utilizado, con las paradas, las familias que hay en cada parada y la clasificación de los alimentos según las familias. También se puede ver el sentido de rotación del cultivo. Animaros, es muy fácil de hacer y da muy buenos resultados sin prácticamente mantenimiento.
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